Pablo Javier López dialogó con nosotros en el marco de las XXI Jornadas de Actualización Porcina en la Universidad Nacional de Río Cuarto, y comentó la importancia que tiene el sector porcino para el laboratorio español Calier, tanto en su génesis como en su presente y futuro
Pablo Javier López dialogó con nosotros en el marco de las XXI Jornadas de Actualización Porcina en la Universidad Nacional de Río Cuarto, y comentó la importancia que tiene el sector porcino para el laboratorio español Calier, tanto en su génesis como en su presente y futuro
Calier es una compañía de origen español, con sede en Barcelona y presencia en más de 80 países en todo el mundo, a través de 12 filiales y distribuidores. Sus plantas industriales de productos farmacológicos y biológicos para el rubro veterinario se ubican en Europa y América.
Laboratorios Calier en Argentina cuenta con un amplio vademécum por especies, en el cual la producción porcina ocupa un lugar de relevancia: el 60% de los casi setenta productos que Calier tiene en el mercado argentino, se puede usar en porcinos. Aun así, el laboratorio sigue avanzando, como explica López “Estamos generando una mayor diversidad de productos. Este año nuestra gran novedad es la incorporación de una nueva formulación de Roborante, que es un producto clásico, que es un activador metabólico, un estimulante de consumo y que, en la nueva formulación esta reforzado con una gran concentración de aminoácidos, y por ende el impacto es más notable. Es un producto que devuelve mucho, es muy eficaz, y es evidente la acción a las pocas horas. Se usa desde lechones hasta en cerdas gestantes”.
Los desafíos de la industria veterinaria frente a un mundo en constante cambio
Consultado sobre el modo en que los laboratorios se ven afectados por las exigencias de los consumidores y los gobiernos (por lograr una producción animal más sustentable, que funcione bajo entandares de bienestar animal y uso racional de antibióticos, entre otras demandas), Pablo Javier López considera que ya no se trata de tendencias sino de realidades afianzadas y que, es Europa el terreno al que debemos mirar para anticiparnos a lo que se viene en nuestro país: “Allí hay casi una restricción absoluta en el uso de antibióticos, salvo casos de una urgencia sanitaria especial, para lo que hay que presentar una declaración, el veterinario que no se alinea a esas reglamentaciones tiene consecuencias penales, multas y hasta la quita de su matrícula profesional; y creo que de a poco va a llegar, quizá no en lo inmediato, pero va a llegar”, explica el veterinario y agrega que Calier está trabajando en ese sentido, en opciones y alternativas, con inmunomoduladores principalmente, con productos que incluso ya están disponibles en el mercado argentino.