La Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos (CAPPER) emitió un comunicado en el que denuncia abusos de precios en el eslabón comercial

El mercado de la cadena porcina siempre presenta desafíos para todos los actores. Los productores de cerdos los venimos asumiendo y generamos acciones tendientes a sortear los obstáculos y apostar por mayor calidad de carne y competitividad en la producción.

Sin embargo, una vez más el escenario se torna complejo en esta época del año. Sostener los precios de los capones entre los meses de abril y agosto se constituye en una situación desafiante, entre otras cosas, por ciertos abusos que se producen en la relación comercial con los compradores de cerdo.

En este sentido, la pregunta es concreta: ¿qué diferencia existe entre los capones que se venden durante estos meses de frío y los que se vendieron anteriormente? ¿Por qué se paga menos a los productores a esta altura del año, siendo que la producción es la misma?

Ante una relación asimétrica, la mayoría de los productores porcinos quedamos sujetos a las arbitrariedades estacionales que cometen ciertos compradores. Precisamente, nos vemos perjudicados por recibir un precio diferenciado por los capones más pesados de una tropa.

En promedio, los descuentos alcanzan hasta $2 y $3 por kilo para los animales más gordos e incluso con descuentos del 1% para los que tienen un porcentaje de magro supuestamente inferior al exigido (en esta época del año). Sin embargo, no existe un mecanismo transparente que asegure tanto a los compradores como a los productores comprobar esta situación.

Desde Capper apostamos a seguir mejorando la calidad de la producción, pero consideramos que la forma no es bajo la presión de un sistema poco transparente de reducción unilateral y estacional del precio. Los desafíos de fortalecer al sector no deben distinguir actores, porque el crecimiento favorece a toda la cadena.

Fuente: Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos (Capper).-