Por los problemas energéticos y deficientes prestaciones, empresarios se quejaron al EPRE y reclamaron sanciones y multas para la cooperativa El Quebracho

Importantes pérdidas económicas sufrieron en las últimas semanas un grupo de empresarios porcinos que cuentan con una granja de producción de cerdos, ubicada en la ruta 18 kilómetro32. Adjudicaron exclusivamente la responsabilidad de los severos problemas de prestación de servicios eléctricos a la Cooperativa El Quebracho.

En la nota que se envió en las últimas horas, al Ente Regulador de la Energía de Entre Ríos (Epre), se hizo saber por parte del titular de la firma, Alejandro Di Palma, que están siendo afectados por un servicio eléctrico que no es el adecuado, y deja de ser "decente".

El cansancio del grupo empresarial no es nuevo. "Venimos reclamando históricamente sin ninguna respuesta más que la negación y en este último tiempo, estamos siendo objeto de una desatención total", se alertó en la nota remitida el organismo de contralor.

Se enumeraron las series de incidentes e inconvenientes eléctricos. "El pasado 20/4/ 2022 se cortó el suministro eléctrico en nuestra granja a las 22,24 hs, recién fue atendido el reclamo telefónico, el día 21/4/22 a las 7 hs, mientras que el servicio eléctrico fue repuesto, recién a las 10 hs".

El día 24/4 "se cortó una de las fases del servicio eléctrico a las 23,32 hs, recién a las 6,30 del 25/4 recibimos un mensaje de un celular privado, aceptando el reclamo, la energía fue repuesta en sus tres fases a las 8,40 hs de ese día".

Se alertó que la Cooperativa Quebracho, "no solo tiene problemas en sus cables eléctricos, que ya son elocuentes, ahora es sugestiva la falta de respuestas a las líneas de reclamos".

Por los cortes de luz, se dio cuenta que por la "desatención y falta de respuestas, se produjeron daños y perdidas económicas. Entre ellas, perjuicios en seis lámparas infrarrojas de 250 W quemadas; 3 motores de gestación que no arrancan; un ventilador de maternidad que no corta; un sensor de proximidad capacitado de comedero de engorde que no funciona; nuestras de semen expuestas a temperaturas no aptas para su conservación; y lo más grave, privación de agua y comida a más de 8.000 cabezas de ganado porcino; dificultades para llevar adelante tareas automatizadas y cotidianas en la granja".

Desde el sector empresarial, se reclamó al EPRE por todo esto que "se registren las fallas sufridas en los equipos mencionados y proceder a multar a la empresa proveedora del servicio por una inadmisible falla en la atención de los múltiples reclamos resultantes de la negligente operación del servicio público".

[Diario UNO]