La Enteropatía Proliferativa Porcina (EPP) es endémica en la mayoría de las granjas argentinas. Saber si es el caso de su granja, diagnosticarla correctamente, es el puntapié inicial para darle pelea y mantenerla bajo control.

La bacteria Lawsonia intracellularis es la causante de la enfermedad intestinal conocida como ileítis (Enteropatía Proliferativa Porcina), que causa diarrea y reduce la ganancia de peso en fase de crecimiento y terminación.

Un artículo desarrollado por el equipo argentino de Boehringer Ingelheim Animal Health, detalla los procedimientos que se deben realizar para conseguir un diagnóstico certero.

Para el diagnóstico de esta enfermedad es importante determinar la causa de los signos clínicos -como diarreas o baja performance- en el grupo de cerdos afectados. Ante la sospecha de EPP, es necesario consultar al profesional de confianza para que tome muestras de sangre, heces y/o tejido intestinal y las envíe al laboratorio.

Obtenido el resultado definitivo de laboratorio se puede tomar la decisión correcta para el control de la enfermedad (vacunación, medidas de manejo) y así solventar el problema en granja.

Parecidas, pero diferentes

Los signos clínicos de la Enteropatía Proliferativa Porcina a menudo se confunden con otras enfermedades del tracto intestinal, por lo que es importante realizar un diagnóstico diferencial en todos los casos (una comparativa que permita asegurar que no se trata de otros agentes patógenos causando enfermedades similares a ileítis).

Por ejemplo, en la presentación crónica o PIA (Adenomatosis intestinal porcina, por sus siglas en inglés) es fácilmente confundida con formas endémicas de infecciones por Coronavirus o Rotavirus, presentaciones leves de Brachyspira, salmonelosis por Salmonella typhimurium, Circovirosis porcina y diarreas de origen nutricional; además, con frecuencia pueden ocurrir infecciones mixtas involucrando a algunos de estos agentes.

Por otro lado, en su presentación aguda o hemorrágica (Enteropatía hemorrágica Porcina, PHE por sus siglas en inglés) la ileítis puede confundirse con úlceras gastroesofágicas, así como también con presentaciones agudas de Brachyspira e inclusive con cuadros clínicos asociados a torsión intestinal.

Cómo se diagnostica

Antemórtem

Lo primero es la anamnesis, es decir, toda la información y datos de valor sobre la salud general del animal que pueden aportarse al veterinario con el fin de ayudarlo a diagnosticar la enfermedad.

Posteriormente, corresponde tomar muestras de sangre y heces, con las que el laboratorio realizará diferentes procedimientos de análisis para determinar la presencia de Lawsonia, la bacteria responsable de EPP.

Postmortem

Es importante tener en cuenta que la toma de muestras de tejidos intestinales debe realizarse lo más pronto posible después de la muerte del animal (menor a dos horas después de la muerte sería lo ideal, mientras más rápido mejor), ya que el proceso de autolisis (muerte celular) podría hacernos perder tiempo e información útil para tomar una decisión acertada.

Es conveniente incluso, ante la sospecha de ileítis en un animal convaleciente, que el propio veterinario sea quien se encargue de la toma de muestras tras su muerte, para reducir el margen de error en el procedimiento.

En caso de presencia de Lawsonia, en los tejidos intestinales se encontrarán ciertas lesiones características a simple vista, de las cuales el engrosamiento de la mucosa es el más evidente.

Para conocer en detalle todos los métodos de diagnóstico, acceda al artículo original haciendo click aquí

Finalmente, es importante saber que contamos con herramientas que nos van a ayudar a diagnosticar la enfermedad, sea cual fuere su presentación para, de esta forma, tomar las medidas de control y prevención asociadas a mejorar el gran impacto productivo que esta enfermedad ocasiona en nuestros rebaños.

En la próxima entrega, tomaremos este último punto y explicaremos qué solución brindamos contra la Ileitis Porcina y de qué manera podemos medir el impacto de las intervenciones que sugerimos para su control.

Fuente: Depto. Técnico de Boehringer Ingelheim Animal Health Argentina

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