Cuando hablamos de relaciones productivas hablamos de interacciones y colaboraciones que se establecen entre las personas y equipos de trabajo y que dan como resultado una mejor eficiencia para producir y lograr los objetivos comunes. Las relaciones productivas son fundamentales para el éxito de cualquier organización, ya que impulsan la eficiencia, la innovación y la satisfacción laboral.
Desde un enfoque de la producción porcina, son varios los aspectos que debemos tener en cuenta, ya que son muy diversas las visiones de los diferentes integrantes del sistema productivo, desde el operario hasta el gerente e incluso el mismo dueño de la empresa, quienes en conjunto trabajan para llegar a un objetivo: maximizar la producción. Ahora la pregunta es: ¿todos los integrantes de este equipo reconocen y anhelan ese mismo objetivo?
Las tres “C” de las relaciones productivas
Cuando hablamos de equipos, nos referimos a aquellos grupos de personas que tienen un objetivo en común, una tarea en común, un ámbito en común y un resultado en común. El equipo se debe construir y fortalecer, para dar sustentabilidad a las acciones y resultados, y finalmente incrementar el bienestar de las personas. Dentro de nuestros equipos de trabajo siempre hablamos de las 3 “C”:
COMPROMISO
Hace referencia a la capacidad de elección de un individuo por su equipo. El compromiso guía y da sentido para ir hacia los objetivos propuestos. Es lo opuesto a la obligación.
CONFIANZA (CONFIAR Y SER CONFIABLE)
Poner algo o alguien al cuidado de otro, eso es confiar. Alguien que reserva y cuida lo que se le deposita es confiable. La confianza es la generación de credibilidad y unión de propósito.
COMUNICACIÓN
Es la valoración de unos por otros, escuchando con apertura y hablando con responsabilidad sin defender posiciones, sino buscando el bien y la acción común.
La comunicación productiva es clave
Me gustaría hacer foco esta vez en la comunicación, lo cual me parece clave y puntapié inicial, ¿qué somos? Una red comunicándonos continuamente. Véanlo de esta forma.
En nuestra capacidad de comunicarnos con otros y generar relaciones productivas para coordinar acciones se encuentra escondido el secreto de nuestros resultados. La comunicación no pasa por lo que digo, sino por lo que el otro escucha.
La comunicación es el principio de todo beneficio y la razón de todo conflicto. Dependerá del modelo de comunicación que tengamos.
La comunicación tradicional se centra en transferir la información y el poder de la verdad, desde el Emisor hacia el Receptor E-M-R. “Esto es así! Y no se discute”, muchas veces lo escuchamos, sin tener en cuenta quién está recibiendo la información (personas), se presta poca atención al receptor, no se tiene en cuenta su entorno referido a sus costumbres ni al ambiente donde se desarrolló.
En esta forma de comunicación hay, sin dudas, posibilidades de que se produzcan malentendidos, ya que puede haber diferencias entre: 1. Lo que pienso, 2. Lo que deseo decir, 3. Lo que creo que digo, 4. Lo que “en realidad” digo, 5. Lo que tú deseas escuchar, 6. Lo que “realmente” escuchas, 7. Lo que deseas comprender, 8. Lo que crees que comprendes, y 9. Lo que “realmente” comprendes. Existen realmente, 9 posibilidades que se produzca un malentendido.
Normalmente son comunicaciones de conflicto, donde no se llega a certezas completas o acuerdos del conjunto, es decir los Emisores como dueños de verdad y los receptores a veces con cierto temor no cuestionan u opinan, incluso por respeto a la jerarquía del Emisor. Estas características de comunicación interpersonal han sido y siguen siendo uno de los mayores inconvenientes para producir cambios profundos, transformaciones elegidas y resultados nuevos en las organizaciones.
Comunicación productiva: ¿qué significa?
Ahora imaginemos en la estrella organizacional de nuestra empresa, un eje vertical donde está el eje humano, de las personas y sus relaciones. Nuestro mayor desafío es entender que en este eje se establecen conversaciones, las cuales deben ser exactas, concretas y entendidas por todos para lograr lo que llamamos comunicación productiva, siempre que se cumplan ciertas premisas de la comunicación. La comunicación productiva es una propuesta que tiene como principal postulado que “nadie obtiene mayores resultados que lo que sus relaciones le permiten”. La comunicación productiva se basa en el intercambio de mensajes claros, concisos, la escucha activa, la empatía y la adaptabilidad, para lograr una mayor eficiencia en la comunicación, un ambiente más favorable y motivador que ayude en la resolución de conflictos y facilite la toma de decisiones. La comunicación es esencial que sea productiva para facilitar el trabajo en equipo y la cooperación entre todos los miembros de la empresa con un objetivo compartido.
La comunicación debe ser una acción en común, donde ambas partes estén involucradas, para ello se requiere un mensaje claro, abierto a la escucha y al hablar.
El hablar responsable y la escucha comprometida son ejes fundamentales sin los cuales no se llega a buen puerto o al menos al máximo posible.
Las reuniones con el personal
Las reuniones con el personal son muy productivas y enmarcan el contexto de lo que pretendemos. Ahí se cruzan opiniones, sugerencias, amenazas y oportunidades de hacer de la mejor manera las cosas, prestar atención al receptor en su contexto, explicar las acciones con ejemplos y vivencias haciendo de la comunicación un momento agradable, donde todos podemos expresar lo que sentimos sin temores. Si la comunicación es productiva y efectiva se logra un mayor nivel de confianza y compromiso tras el objetivo que ahora es global, todos anhelan alcanzar una meta común.
Estrategias para una comunicación productiva
Pueden existir diferentes formas de avanzar en esta idea de comunicación productiva, podrán ser en reuniones semanales de áreas como la maternidad, por ejemplo, donde podemos revisar los resultados obtenidos de la semana anterior, observar lo que cada uno necesite y opinar sobre uno u otro manejo, medidas correctivas propuestas, lograr la aceptación de un posible cambio en hacer tal tarea, celebrar los que nos salió bien, aceptar errores, las posibilidades son innumerables.
Conclusiones
Sin lugar a duda, la manera en la que se relacionan y comunican los equipos de trabajo, incluyendo a todos los miembros del sistema productivo, define muchas veces la eficiencia en el cumplimiento de los objetivos. La propuesta es buscar un cambio en las relaciones y comunicaciones que se plantean a diario en nuestras granjas, revisar si las acciones sobre este tema tan importante merecen algún cambio o estamos enfocados correctamente, entendiendo que la comunicación es una pieza clave. No debemos olvidar que, además de infraestructura, nutrición, genética y toda la tecnología aplicada hoy en la producción, siempre están presentes y vigentes las relaciones humanas.
Por: M.V. Federico Vienny. Técnico Comercial Nutrifarms; Facilitador profesional | federico.vienny@nutrifarms.com.ar
Referencias
Alejandro Marchesan (2023). Comunicación Productiva en la Era de las Relaciones. Editorial Leven Anclas, ISBN 10: 9874511826, ISBN 13: 9789874511829
Centro de Entrenamiento Ontológico Profesional (CEOP), Cdad. Autónoma de Buenos Aires, Argentina