La semana pasada se detectó Peste Porcina Africana en dos granjas. El fin de semana se confirmó el tercer caso en una granja en Brandeburgo, cerca de la frontera con Polonia, territorio en el que la enfermedad está muy extendida.

La peste porcina africana es una de las enfermedades más devastadoras que afecta a estos animales. Es altamente contagiosa y puede diseminarse a través de contacto directo o indirecto.

También puede provocar una alta mortalidad ya que el virus puede persistir durante mucho tiempo en el medio ambiente, incluso en una variedad de productos alimenticios porcinos.

Otro de los animales que puede albergar el virus es el jabalí. Actualmente, no hay vacunas disponibles que protejan de la enfermedad a los animales.

El nuevo brote se registró en una pequeña granja de Alemania que tenía cuatro cerdos, dentro de una zona donde la enfermedad es común entre los jabalíes.

Hasta la semana pasada, solo se habían reportado casos en animales salvajes, según informó Reuters.

Las alertas se intensificaron hace pocos días dado que la peste porcina africana se encontró en dos granjas cercanas, la semana pasada. En una con 200 animales y en otra con solo dos cerdos. Todos han sido exterminados.

China y otros compradores de carne de cerdo prohibieron las importaciones del producto alemán en septiembre de 2020 después de que se confirmara el primer caso en animales salvajes.

Con los nuevos casos no se espera que haya un impacto importante en el mercado, ya que las exportaciones de carne de cerdo alemanas ya están sujetas a prohibiciones de muchos importadores.

La enfermedad no es peligrosa para los humanos, aunque sí es fatal para los cerdos. Muchos países imponen prohibiciones a la carne porcina de las regiones que padecen la enfermedad.

Fuente: Pig Progress