Desde CAICHA advirtieron a los consumidores que los derivados de cerdo se volverían “un lujo” para los argentinos, porque “en 20 días el precio al productor de cerdos en pie aumentó un 40%”. Jorge Brunori recogió el guante y desmintió la afirmación con un informe imperdible
“Advierten que por el cepo a las importaciones habrá fuertes subas en el precio de la carne de cerdo”, se titula la tendenciosa nota que publicó ayer TN tras una entrevista a Gustavo Lázzari, representante de la Cámara Argentina de la Industria de Chacinados y Afines (CAICHA).
El referente de INTA, M.V. Mg. Jorge Brunori, publicó hoy un informe en el que echa luz sobre la compleja situación que atraviesa el sector porcino argentino, en parte, por lo estancado de los precios al productor, que redunda en estrechísimos márgenes de rentabilidad e incluso en algunos casos, en números en rojo.
A continuación, se transcribe el informe completo que Brunori tituló: “Una mirada diferente sobre la situación de la producción de carne de cerdo en Argentina” y que aclara, no sólo que los aumentos del capón no han sido tales sino que, incluso con todo en contra, el productor argentino de carne de cerdo sigue ofreciendo al consumidor “una carne de altísima calidad y muy accesible en precio”.
___
El pasado martes 12 salió publicado en medios nacionales que se esperaban fuertes aumentos en la carne porcina pues se habían producido aumentos del precio del cerdo del más de cuarenta por ciento. Esto no es real pues si analizamos los datos publicados por el Boletín semanal de precios del cerdo de la Asociación de Productores Porcinos en base a datos del MAGPyA, podemos observar en el Cuadro 1 que el aumento en los primeros 6 meses de este año fue mucho menor:
Al analizar la variación de precios del kilo de cerdo en los últimos 20 días, en donde la información periodística dice “…..En 20 días la carne porcina aumentó un 40% y hay preocupación por el abastecimiento de salchichas para panchos, entre otros productos….” (Fuente: www.tn.com.ar - TN Economía), puede observarse en el siguiente cuadro el aumento del kg de cerdo de los últimos 20 días fue muy inferior al porcentaje difundido mediáticamente.
Como queda demostrado, el sector primario de la cadena porcina (producción) recibió un aumento del kilo de cerdo en pie muy inferior al que se mencionó. Este eslabón de la cadena ha sido muy afectado en su rentabilidad en los últimos tiempos producto principalmente del desbalance entre el aumento de precio de los granos (maíz y soja), que representan 70 % de los costos de producción, y el precio del cerdo en pie. Esto puso en jaque la rentabilidad de sus granjas y la sostenibilidad productiva, en especial de los pequeños y medianos productores que representan más del 90 % de las granjas productoras de cerdos del país.
A este desbalance entre los principales insumos de la producción porcina y el precio de venta del cerdo se le suma la fuerte suba de las importaciones que durante el año 2021 se incrementaron el 86 % en volumen comparado con lo importado durante el 2020 (Tablero de indicadores. Dic. 2021. MAGPyA). En los primeros cinco meses del presente año el incremento fue del 64 % (Boletín MAGPyA). A esta situación se le sumó la caída de las exportaciones que durante el citado período se redujeron en un 82 %.
Grafico 1. Variación del precio del maíz, soja y cerdo promedio. Periodo 13/06/2021 al 11/07/2022.
Estos indicadores demuestran claramente la situación crítica que el sector porcino viene atravesando, y en especial las granjas de pequeñas y medianas escalas productiva. Esto lo confirman los datos publicados por el informe del SENASA que compara la evolución de la cantidad de establecimientos, unidades productivas y stock entre marzo 2020–2022 en donde se verifica una disminución en el número de establecimientos y unidades productivas de más del 8 %
Queda demostrado en el análisis de estas variables que la situación económica del sector primario es por demás de compleja, pero a pesar de esta situación y con el desarrollo y crecimiento que el productor porcino hace más de dos décadas viene demostrando se sigue consolidando como una carne alternativa para los argentinos. Esto lo demuestra la información del MAGPyA en donde se verifica a mayo del 2022 un crecimiento del consumo de carne aviar del 1%, de carne bovina del 1.5 % mientras que la de cerdo creció el 10 %. Estos indicadores demuestran por sí solos que el productor de cerdo estuvo lejos de recibir el aumento que se informa en los medios periodísticos: muy por el contrario, con rentabilidad muy ajustada o negativa pudo ofrecer para la mesa de los argentinos, en situaciones macroeconómicas tan complejas como la que atravesamos y en donde el poder adquisitivo del consumidor no deja de caer, una carne de calidad y muy accesible en precio.
Por: Méd. Vet. Mg. Jorge Brunori. INTA Marcos Juárez.
Para acceder al documento publicado por INTA, haga click aquí.