Investigadores descubrieron que la chaucha de Espina Corona -nativa del norte argentino-, posee alto contenido de un tipo de saponinas, que pueden incluirse en las dietas de los cerdos y aportan incontables beneficios para la salud, la nutrición y el bienestar animal.
En Fericerdo, nos encontramos con el M.V. Gerardo Roulet, del equipo técnico de Bioaromas Latinoamericana, quien dio detalles del hallazgo y sus avances en una entrevista exclusiva con El Productor Porcino.
Para entender esta historia hay que explicar primero que Espina Corona es una planta autóctona del norte argentino, de cuya semilla se extrae una goma ampliamente usada en la industria alimenticia humana como espesante para aumentar la densidad de determinados alimentos como quesos, yogures y pastas.
La aguda observación de productores locales y la inquieta curiosidad de un grupo de investigadores dedicados a la nutrición animal, derivó en un fascinante descubrimiento.
Entre los saberes populares del norte argentino, es ampliamente difundido que los animales que consumen la Espina Corona en estado silvestre, en general gozan de buena salud. Con ello en mente, el equipo técnico de Bioaromas Latinoamericana presentó su proyecto de investigación ante la Red Eureka, en busca de apoyo para la investigación y lo consiguió en colaboración con otra empresa española y los organismos de ciencia y técnica de ambos países.
Los hallazgos son de un enorme valor científico, pero es en su aplicación en la nutrición animal donde se encuentra el aspecto más preciado: el alto contenido de saponinas que posee la Espina Corona, (saponinas triterpénicas) y la incontable cantidad de beneficios que posee para la salud, la nutrición y el bienestar animal.
Algunos beneficios de su inserción en las dietas:
- Es un producto de baja inclusión (300 gramos por tonelada aproximadamente)
- Disminuye la emisión de gases de efecto invernadero;
- En monogástricos mejora la absorción intestinal de muchos nutrientes;
- Inhibe el desarrollo de bacterias patógenas;
- Favorece el desarrollo de las bacterias benéficas del intestino;
- Inhibe las bacterias productoras de amoníaco, lo cual reduce olores y gases dañinos para los animales y los operarios.
Tras el hallazgo, Bioaromas lanzó al mercado su producto denominado SapCor Bio. En la empresa hablan de un producto de triple impacto: “Para producir SapCor Bio no se destruye la planta, sino que se usa sólo el fruto. Se aparta la semilla para la producción de goma y del subproducto de esa industria se obtienen las saponinas para la nutrición animal. En segundo lugar, logramos una mejora en la performance productiva de los animales y, por último, estamos reduciendo los gases de efecto invernadero”, comenta el técnico.
En el caso concreto de los cerdos, “las saponinas inhiben las bacterias productoras de amoníaco, lo cual reduce los trastornos a nivel de las mucosas en los animales, lesiones oculares o respiratorias que predisponen a la entrada de otros patógenos”, explica Roulet.
Todo ello -resume el veterinario- redunda en mejor salud y bienestar animal, pero también mayor bienestar para los operarios del galpón; además de reducir la corrosión que produce el amonio en la infraestructura de los galpones y otros elementos metálicos.
Mirá la entrevista con el testimonio completo de M.V. Gerardo Roulet: