Para 2019 incluso pretenden duplicar ese número. A pesar de ser un bajo volumen a nivel mundial, es un gran comienzo

En el marco de un encuentro que mantuvieron con la prensa las autoridades de la Cámara de Productores Porcinos de Córdoba (Cappcor) anunciaron esta “noticia espectacular” en medio de una situación que definieron como “complicada” para el sector porcino.

La ronda de prensa se desarrolló ayer con el objetivo de informar sobre el programa de la 3ra. Reunión Porcina de la Región Centro (Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos), que tendrá lugar el viernes 19 de octubre a partir de las 8:30 horas en el Campus de la Universidad Siglo 21 de Córdoba, con entrada gratuita.

El presidente de Cappcor, Mario Aguilar Benítez, detalló el cuadro de complicaciones que se le ha planteado a la actividad a partir del cuádruple efecto de devaluación, suba del precio del maíz y la soja, caída de la producción de granos por la sequía del verano pasado y las adversidades económicas que también afectan al consumidor interno. Sin embargo, el productor mantuvo su optimismo sobre el futuro y confió en que los próximos meses el panorama irá cambiando y las vicisitudes actuales se superarán paulatinamente.

En medio de ese contexto, Alfonso Aguilera, vicepresidente de la Cámara, aportó lo que calificó como “una noticia espectacular”: desde el 2017 Argentina está exportando carne de cerdo, las ventas ascenderán este año a unas 20.000 toneladas, se aguarda la apertura de los mercados de China y Vietnam –lo que ocurriría antes de fin de año- y queda abierta una expectativa con alto grado de certeza de que en 2019 los embarques se duplicarán, a 40.000 toneladas.

Por primera vez, el año que vienes las exportaciones de carne porcina superarían a las importaciones, en lo cual mucho ha tenido que ver el Consorcio Exportador que formaron 12 productores (hoy son una veintena y su número pronto se ampliará).

Las exportaciones comenzaron en 2017 con el equivalente a 1.200 porcinos por mes: actualmente ya se ubican en el equivalente a 8.000 animales, lo cual ayuda a descomprimir –como siempre se pensó- las limitantes del mercado interno.

Fuente: Agroverdad