Un artículo técnico publicado por la Asociación Argentina de Productores de Porcinos aborda el manejo del ayuno del capón y rompe con algunos mitos fuertemente arraigados

Las ventajas del ayuno

El ayuno antes del transporte para faena es una práctica normal en la producción porcina. Sus principales ventajas son que reduce la mortalidad y previene a los cerdos de sufrir náuseas y vómitos durante el transporte, reduce el riesgo de contaminación de la res al disminuir la incidencia de rupturas durante la evisceración, reduce la cantidad de Salmonella en intestino delgado y puede contribuir a reducir la incidencia de carnes PSE (pálida, suave y exudativa) en cerdos portadores del gen halotano, lo que altera el color, la textura y el sabor de la carne, acidificándola y ocasionándole baja retención de agua, menor valor nutricional y rechazo por el consumidor.

Las desventajas de manejar mal el ayuno

En las primeras 24 horas de ayuno el cerdo pierde un 5% de su peso vivo (fundamentalmente contenido intestinal) y el 1% de su peso canal aproximadamente. En 48 horas pierde alrededor del 7% del peso vivo y el 2 % del peso canal. También puede contribuir a aumentar la incidencia de úlceras y de carnes DFD (Oscura, firme y seca del inglés dark, firm and dry), característica que, al igual que la carne PSE es poco deseable, ya que se caracteriza por tener una alta capacidad de retención de agua, aunque su apariencia sea seca.

Manejar bien el ayuno puede incrementar el ingreso por animal

Una correcta gestión del ayuno pre-faena puede aumentar de un modo importante los ingresos por cerdo y mejorar tanto la Ganancia Media Diaria como el Índice de Conversión.

En general, teniendo en cuenta los factores de bienestar, calidad de carne, y el objetivo de obtener el mayor ingreso posible por cerdo, el ayuno entre la última comida y el sacrificio (incluyendo ayuno en granja, transporte y espera pre-faena) no debería superar las 18-24 horas.

Para leer el artículo en detalle, haga click aquí