24 de noviembre del 2024

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20 abr. 2021

EL ÚNICO LECHÓN QUE ENGORDA ES EL QUE NACE VIVO

En este breve informe recorremos los factores que aumentan el riesgo de muerte prenatal de los lechones y qué condiciones productivas debemos controlar dentro de la granja para aumentar la tasa de nacidos vivos.

En este breve informe recorremos los factores que aumentan el riesgo de muerte prenatal de los lechones y qué condiciones productivas debemos controlar dentro de la granja para aumentar la tasa de nacidos vivos.

El número de lechones nacidos totales es el sumatorio de los nacidos vivos más los nacidos muertos (incluye macerados) y los momificados. Es lo que se conoce como tamaño de camada, y por supuesto, el primer paso es tener la seguridad de que el dato de mortinatos es correcto, para lo que debemos repasar el sistema de anotaciones y confirmar que se apuntan todos los que son y son todos los que están.

También, y para ello, debemos discernir entre nacidos muertos y los que mueren dentro del periodo que va entre el nacimiento y la observación, es decir, los “encontrados muertos”.

A su vez, en los nacidos muertos incluimos los que ya estaban muertos antes de comenzar el parto y los que se mueren durante el parto.

Tip: La diferencia del nacido muerto con el que nació vivo está en que los pulmones de los segundos flotan en agua.

Sabemos que 3 de cada 4 lechones que nacen muertos corresponden a los que por orden están en el último tercio del parto. El útero de una cerda estándar tiene una longitud de poco más de un metro, y el cordón umbilical de un lechón unos 70 centímetros. En el momento de romperse el cordón se interrumpe el aporte de oxígeno vía sangre materna, y por lo tanto debe comenzar a respirar, disponiendo de 2 a 5 minutos para salir al exterior.

Por ello, muchos lechones que se mueren en el canal del parto tienen en sus vías respiratorias restos de meconio (líquido color marrón que rodea al lechón, producto de su metabolismo intrauterino) que nos ayuda a hacer el diagnóstico diferencial.

Cuando fijamos nuestro objetivo de nacidos muertos sobre el total de los nacidos en la granja, debe hacerse en cada granja en particular derivado sobre todo hoy del gran tamaño de camada, y siendo esencial diferenciar en dicho porcentaje, los que son realmente nacidos muertos de los que se sacrifican humanitariamente al nacer y cumplimentar las camadas.

No necesariamente un 10% de nacidos muertos tiene que ser menos rentable que un 8 o un 6 %. No es menos cierto que los nacidos muertos guardan relación con la tasa de lechones muertos durante la lactación, y esto sí que es digno de tenerse en cuenta.

Especial atención debemos prestar al concepto de que una gran mayoría de los mortinatos proceden de pocas cerdas en condiciones normales de granja. Son muchas las cerdas que a lo largo de su vida productiva no tienen un solo lechón nacido muerto. En la literatura encontramos que entre 40-60 % de las cerdas no tienen mortinatos, y esto lo podemos analizar en nuestra propia granja, pudiendo seguir un criterio de selección negativo de las que tengan mayor número de nacidos muertos en los tres primeros partos.

Factores de influencia

Las principales condiciones productivas que influyen fisiológicamente en la tasa de nacidos muertos son:

Edad – Ciclo productivo de la cerda: Los mortinatos aumentan drásticamente en la cerda de más partos, y de forma súbita de un parto al siguiente (del 5º al 6º parto, del 6º al 7º muy frecuente, del 7º al 8º y continuos), dependiendo de un factor granja que debemos analizar en cada caso.

Prolificidad: los nacidos muertos tienden a aumentar a medida que se incrementa el tamaño de camada.

Condición corporal de la cerda: relacionado con la nutrición de las cerdas. Las cerdas grasas tienen más mortinatos, así como las cerdas con estreñimiento, por una mayor duración del parto (> 5 horas). Ciertas deficiencias de micronutrientes, así como presencia de toxinas o micotoxinas también nos originarán más nacidos muertos. El manejo del alimento en el preparto también influye en dicho parámetro, así como el balance electrolítico y el incorrecto suministro de agua de calidad.

Ambiente en las salas de partos: elevadas temperaturas (> 25ºC) y la elevada concentración de monóxido de carbono (mal funcionamiento de quemadores, mala ventilación…) incrementan la tasa de mortinatos, pudiendo ser muy significativa. Menos de 10 gramos de hemoglobina por cada 100 ml de sangre determinan un aumento de nacidos muertos.

Sanidad de las cerdas: son muchos los procesos infecciosos tanto bacterianos como víricos que dan origen como signo clínico a un aumento de los nacidos muertos. No olvidemos que también las parasitaciones tanto internas como externas (sarna especialmente), dan lugar a dicho incremento.

Manejo de los partos: son muchas las granjas que reducen los nacidos muertos con una adecuada atención de los partos (sobre todo los distócicos), no siendo necesario en otras. Debemos tener precaución con el uso de hormonas tanto para sincronizar el parto (prostaglandinas naturales o sintéticas) como para acelerarlo (oxitocina), ya que en muchos casos tan solo provocan un aumento de los mortinatos. La interacción persona – cerda debe ser considerada.

 


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