15 nov. 2018
BIOSEGURIDAD: EN LAS GRANJAS ARGENTINAS HAY DE TODO
Evaluaron las medidas aplicadas en más de 300 granjas porcinas de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos, y hallaron gran variabilidad
Evaluaron las medidas aplicadas en más de 300 granjas porcinas de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos, y hallaron gran variabilidad
Evaluaron las medidas aplicadas en más de 300 granjas porcinas de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos, y hallaron gran variabilidad
Un trabajo de investigación realizado por la veterinaria Laura Alarcón, publicado en las Memorias del último Congreso Nacional de Producción Porcina, evaluó las medidas de bioseguridad aplicadas por 192 granjas comerciales y 110 granjas de genética, ubicadas en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos.
La investigadora analizó las medidas aplicadas tanto de bioseguridad externa (medidas o protocolos que tienen como objetivo evitar la introducción de nuevos patógenos en la granja) como interna (prácticas de manejo y protocolos que tienen como objetivo limitar la persistencia y diseminación de patógenos dentro de la granja). “A estas dos categorías –aclara la investigadora- se le puede añadir una tercera, la biocontención, que se compone de las medidas que impiden o dificultan la salida de patógenos de la granja”.
Las medidas de bioseguridad analizadas
Las encuestas incluyeron consultas sobre reposición, semen, vehículos, personas, vecindad (bioseguridad externa), manejo, transición, engorde, instalaciones y limpieza, personal (bioseguridad interna):
Las Conclusiones
En esta primera evaluación sistemática sobre la bioseguridad que se realiza en granjas porcina en el país se identificaron tres tipos de granjas con respecto a su bioseguridad, un grupo de granjas de mayor tamaño y que implementa medidas de bioseguridad externa e interna y otros dos tipos de granjas medianas y chicas que prácticamente no implementan medidas.
Las medidas que mayormente diferencian los tres tipos de granjas son las asociadas al ingreso de vehículos de matadero, personal y visitas, así como el manejo en bandas de producción y manejo de la maternidad.
Dentro de estos grupos la variabilidad de aplicación de las medidas de bioseguridad es alta, probablemente por diverso nivel de conocimientos y experiencia de veterinarios y productores, sus personalidades y su conexión con fuentes de información técnica.
Con respecto al análisis de riesgo de Diarrea Epidémica Porcina (DEPv) nos demostró que en el caso de que existiera un ingreso al país de un patógeno viral la gran mayoría de granjas resultarían infectadas.
Las vías identificadas con un mayor riesgo de ingreso del virus a una granja fueron: los animales de reemplazo y el vehículo que transporta estos animales, los vehículos que transportan alimento, y las visitas.
El porcentaje de reducción del riesgo (aplicación de medidas de bioseguridad) medio fue de 39% y hubo una gran variación en los puntajes entre granjas, lo que significa que todavía hay margen de mejora en muchas granjas porcinas.
La falta de aplicación de algunas medidas básicas de bioseguridad, implica un riesgo grave debido al papel central de los proveedores de genética en el sistema de producción porcina.
La introducción de animales de reemplazo fue una de las rutas con menor aplicación de medidas.
Los puntajes generales para bioseguridad externa fueron más altos que los puntajes de bioseguridad interna, lo que significa que es más fácil implementar medidas de manejo para la prevención de patógenos que ingresan a una granja en lugar de implementar medidas para prevenir la diseminación de patógenos dentro de la granja.
Esta metodología permitió la detección de granjas con poca bioseguridad que podrían ser críticas para todo el sistema de producción que requieren una pronta implementación y/o corrección, más importante aún si consideramos que el país erradicó la PPC, existe un plan de control y erradicación de enfermedad de Aujeszky y es libre de PRRS y PED, estas últimas presentes en países limítrofes.
Para leer el artículo original, publicado en las Memorias del 14° Congreso Nacional de Producción Porcina, haga click aquí
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