19 de septiembre del 2024

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04 ene. 2021

OPINIÓN: UN CUENTO ARGENTINO

En una nueva columna de opinión y valiéndose de datos irrefutables, el médico veterinario Horacio Baldovino cuestiona parte de la retórica de los grupos veganos que se movilizaron en contra del potencial crecimiento de la producción porcina en Argentina.

En una nueva columna de opinión y valiéndose de datos irrefutables, el médico veterinario Horacio Baldovino cuestiona parte de la retórica de los grupos veganos que se movilizaron en contra del potencial crecimiento de la producción porcina en Argentina.

En el año 1993 la Facultad de Veterinaria de Casilda organizó las Jornadas de Alta Eficiencia Productiva en Producción Porcina a la que asistió como uno de los oradores más importantes un reconocido referente mundial en porcicultura proveniente de Murcia, me parece recordar, sin rebuscar mucho en mi memoria, que ese fue al primero que vi creerse el cuento argentino.

Este encumbrado profesor se encontró viajando en un micro de la Facultad de Veterinaria, como parte de las actividades de este evento, por plena Pampa Húmeda en un octubre llovedor que amplificaba el potencial de los campos de soja y maíz a nuestro alrededor.

Mirando a ambos lados constantemente, quizá impactado por el contraste con la aridez de su terruño de origen, haciendo cálculos mentales de las toneladas de producción de los dos componentes más importantes de la alimentación de los cerdos y de cuántos cerdos se podrían proveer al mundo y, para nosotros escépticos ya en esos años, otras excentricidades.

Pero realmente el momento en que se terminó de tragar el anzuelo fue cuando preguntó de dónde provenía el agua que se usaba para los cerdos, uno de los asistentes señaló pausadamente con un dedo al piso y le contó que el agua provenía del subsuelo.

El profesor puso cara de incredulidad o de no entender bien y le increpó: ¨¿Cómo? ¿Hacen un pozo y sacan agua en cualquier lado?¨, tardó unos segundos en procesar la escueta respuesta afirmativa de alguno de nosotros y como en una solemne declaración, levantando el índice de la mano derecha nos espetó mirándonos a los ojos: ¨Vuestro país será una de las potencias mundiales en producción porcina dentro de los próximos cinco años¨; les recuerdo que corría el año 93. Por respeto respondimos afirmativamente asintiendo con la cabeza y uno de los más veteranos hizo un intento de explicarle la realidad argentina y las dificultades que tal vez se podrían presentar para, irremediablemente, sabotear el cumplimiento de esa predicción.

A los quince minutos el profesor seguía firme en su idea y el veterano veterinario cabizbajo había desistido ya de tratar de explicar algo tan difícil de entender por los de afuera, y seguía asintiendo, resignado, con la cabeza baja a las eufóricas declaraciones del profesor de Murcia.

En las décadas que pasaron desde ese día, muchos se han creído el cuento argentino, es más, nos lo seguimos creyendo una y otra vez.

Sospecho que muchos de nosotros queremos seguir creyendo aun a sabiendas que es un cuento en la mayoría de las veces. Pero hace pocos meses les tocó a los chinos que se comieron el amague de la firma de un convenio como si los hubiera gambeteado el Diego y pasaron de largo como colectivo lleno.

Fiel a su modo de actuar el gobierno le dio más crédito a los veganos, animalistas, ambientalistas y activistas antiagricultura que a los propios integrantes del sector, que me parece percibir que somos muchos más, y tal vez conozcamos algo más acerca de este tema.

Sabemos que es una costumbre muy nuestra escuchar a todo el mundo hablar sobre lo que sea, el Sr. Larry de Clay fue entrevistado para hablar de la pandemia, ¿médico, epidemiólogo? No, humorista. Es que a veces nos dejamos estar y desprevenidamente nos encontramos en una inercia de darle autoridad a lo que dice un famoso, o un mediático o a un activista por el solo hecho de ser conocido o de haber escrito un libro y con una facilidad increíble creemos en lo que escuchamos sin poner un filtro.

No es mi intención coartar la libertad de expresión del Sr. de Clay ni mucho menos, este señor tiene todo el derecho a opinar acerca de cualquier cosa, el tema está en la autoridad que le damos al escucharlo.

Volviendo a la reunión de nuestros gobernantes con los veganos, animalistas y otros activistas, me surgen algunas consideraciones, los veganos no son más del 1% de la población del país, ninguno de ellos es ingeniero, veterinario, biólogo o profesional de la producción, ninguno de ellos es granjero o productor de alimentos, y aun así, le dieron más peso a sus opiniones que a los representantes de la producción.

Recordando las predicciones apocalípticas de estos personajes en las que nos veríamos tapados por los efluentes de estas mega granjas y aparecería una plaga por año a causa del hacinamiento de millares de cerdos sufrientes de tortura, me permito preguntarme si alguien de nuestros representantes se ha puesto a pensar en estas afirmaciones y ha buscado conocer la dimensión de lo que se afirma. Sospechando que ni siquiera han usado un Excel me permito hacer unos cálculos para poner en perspectiva toda esta información suelta nutriéndome de Google y principalmente de la prestigiosa 333 (www.3tres3.com). Si, nada más que Google más Excel.

Para darle algo de números concretos a esta discusión me puse a buscar a algunos de los países con mayor densidad cerdos (expresado en cabezas por km² promedio país, datos de 2018) que son: Dinamarca 297, Alemania 74, España 61, Japón 24, Francia 21, México 9 y USA 8; tengamos en cuenta que estos valores se obtienen relacionando la cantidad de cerdos totales con la superficie total de cada país, como si los cerdos estuvieran distribuidos en forma homogénea sobre toda la superficie, cosa que no es así, cada país tiene zonas donde se concentra la producción y la densidad de cerdos es mucho mayor a esos valores que ya son importantes.

La densidad de cerdos en Argentina es de 1,26 cerdos por cada km² (valores de 2018) que como se ve es muy baja en comparación con los otros países mostrados más arriba. Ahora bien, el pronóstico de mayor crecimiento dice que en pocos años pueden desembarcar 25 granjas de 12.500 madres cada una, y considerando que en la población general de una granja productiva moderna se estima que puede haber hasta 14 cerdos totales por cada madre activa, la población total de cerdos que aportarían dichas unidades productivas sería de 4.375.000 cabezas, que sumadas a la estimación de 3.500.000 cabezas que hay en la actualidad llevarían el valor de la densidad a 2,83 cerdos por cada km².

Como este valor se sigue viendo muy bajo respecto a los principales productores mundiales se puede calcular, para desafiarlo más, considerando para producir cerdos sólo la superficie de las provincias dónde hay mayor producción porcina: Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos, San Luis, Salta, Chaco y La Pampa que suman 1.159.897 km², si todos los cerdos nacionales y las 25 ¨megagranjas chinas¨ se instalaran en esas provincias las densidad de cerdos ascendería aproximadamente a 6,8 cabezas por cada km²; no llega ni a la densidad actual de USA, está muy lejos de las densidades de Dinamarca (44 veces menos), Alemania (11 veces menos) y España (9 veces menos).

Hace muchas décadas que en esos lugares la cantidad de cerdos es muy alta y aun no se desató ningún apocalipsis sanitario o ambiental. Pero si lo dicen Soledad Barruti y la payasa Filomena te lo canta…relato mata dato.

En un olvidable programa de chimentos, al que accedí fugazmente durante una ronda de zapping de una tarde de tedio, fui testigo de un sobreactuado cruce de palabras entre una supuesta vegana que criticaba furiosamente a la instalación de las granjas ¨chinas¨ y un ignoto periodista que se le oponía; creo que al periodista le molestaba la postura oficialista de la activista y le sacó para el lado de la soberanía preguntando que por qué no se quejaba también de la base militar china de la Patagonia, con envidiable cintura política la chica militante le respondió que la base era científica, y que lo de militar era un ¨cuento chino¨.

Por Horacio Baldovino (2/1/2021)


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